La Cumbre mundial por el clima oficial no es otra galaxia. El otro planeta verde se encuentra a siete paradas de metro. LÃneas gris y rosa y un poco de paseo acelerado para sacudirse el invierno prematuro. El otro planeta más resguardado, se encuentra acomodado en el sistema, pero también es muy crÃtico con él. Es un ecosistema más tropical, más colorido y confortable para el cuerpo. Es la “Green zone†de la Cumbre en la madrileña feria de IFEMA. Es un espacio inmenso y abierto, luminoso y sin tabiques. El foco mediático está más ahÃ, tal como lo certifican la gran cantidad de cámaras profesionales que se distribuyen por la gran sala y envÃan señal al mundo entero. El público muy variado. Cohabitan empresarios trajeados y escolares uniformados. PolÃticos, scouts, voluntariado de ONG’s, Greta fans, meditadores... animan esa otra “acampada†tan diversa. En torno al ágora central se articulan multitud de satélites muy participativos. Mucho foro, mucho cÃrculo dando a entender que éste es un reto que nos atañe a todos/as. Los cojines tirados por los suelos sugieren igualmente que el empeño ecologista puede ser gozoso; las obras de arte con materiales reciclados, los dibujos y pinturas, los originales paneles explicativos reafirman que la lucha contra el cambio climático puede ser amable y creativa. A los rigores del clima no serÃa preciso añadir nuevos rigores humanos. La zona azul es un ecosistema aparte, ése sà tabicado. Allà se urden las grandes decisiones. Allà el común de los mortales tenemos el acceso vedado y sin embargo no quitamos el ojo de sus salas. Deseamos que de su marco amurallado emanen medidas valientes y eficaces, de forma que se cumpla la profecÃa más verde, al tiempo que esperanzada: “Hemos llegado tarde, pero hemos llegado a tiempoâ€. Muchas de las corbatas que veÃamos en la zona verde procedÃan de la azul. Con aldeano y cortés inglés, les hubiéramos mostrado el reloj de muñeca al tiempo que suplicado que hagan los posibles para llegar a tiempo. “Time for actionâ€, pero si puede ser esta vez que sea por fin todos juntos, los que se instalan sobre la blanda y cómoda moqueta y sobre el duro y gris asfalto. La Tierra es la causa que puede unirnos a los de la zona azul, verde y amarilla. Hemos de encontrarnos todos los ecosistemas humanos en este desafÃo vital. La urgencia planetaria demanda que nos reunamos todas las porciones de humanidad no importa el color, el origen, el estrato social, el “curriculum†de incendiario o de bombero... La defensa de la vida y de un futuro sostenible requiere la mayor suma de corazones y voluntades que nunca jamás concitara otra causa. Las grietas aumentan sobre una tierra reseca. El hielo merma, corre diluido y se olvida de ser hielo. Nuevas catástrofes climáticas se gestan no sabemos dónde. El tiempo es ahora y no podemos perder un minuto. Ya corrió la sangre altruista, ya han caÃdo cuántos héroes hicieron falta a favor de los rÃos y los bosques. Ya hemos pasado frÃo en las inmensas carpas clavadas a la vera de los inviernos. Ya nadie por favor cuestionando lo palmario, haciendo oÃdos sordos a la evidencia. Ahora vamos todos juntos/as sin excepción a salvar la Tierra. Es Madre y sólo hay una. |
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